Se necesita un gas inerte para evitar reacciones químicas durante el proceso HIP a temperaturas elevadas y el argón es el candidato ideal.
La supervisión del gas argón HIP y sus impurezas es necesaria para controlar la calidad y la repetibilidad del proceso HIP. El control de calidad general requiere el análisis de las impurezas traza en un rango de 0-100ppm para H2-O2-N2-CH4-CO-CO2-NMHC-H2O en argón UHP.
Las instalaciones HIP procesan muchas toneladas de piezas fundidas de titanio, aluminio, acero y superaleaciones, eliminando la porosidad y mejorando el rendimiento de piezas como álabes de turbinas y componentes de campos petrolíferos.
En casi todos los casos, los metales en cualquier estado requieren tratamiento térmico para mejorar sus propiedades, si queremos que los componentes alcancen los niveles deseados de longevidad y resistencia a la corrosión durante su uso. Sin tratamiento térmico, los componentes de un motor de automóvil, por ejemplo, podrían durar cientos de kilómetros en lugar de las decenas de miles que esperamos. El uso de tecnologías de superficie especializadas mejora aún más las características de uso, sobre todo en entornos severos como los motores de aviación y las aplicaciones submarinas de petróleo y gas.
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